Para el lechón, el proceso de destete puede ser un cambio drástico en cómo se alimenta. Es un ambiente diferente sin la madre, donde debe aprender a diferenciar entre hambre y sed. Esa alimentación vía calostro de la madre es cambiada por agua y sus primeras dietas secas. Por ende, es común hayan dificultades para nutrir lechón en sus primeros días.
Algunos estudios demuestran que hasta un 40% de los lechones tardan más de 10 horas en alimentarse. Inclusive, un 10% puede llegar hasta más de 40 horas tras el destete, y algunos hasta 100 horas. Igualmente, es común nuestros productores evidencien casos de problemas digestivos y mortalidad en las camadas.
Debido a esto, nuestro objetivo principal es asegurarnos una buena transición alimenticia. Evitar la detención o reducción del crecimiento o la proliferación de enfermedades entéricas. Si conseguimos esto, nos será mucho más fácil preservar y mantener la salud de los lechones. Y por lo tanto reducir los costes de producción en esta delicada fase de la porcicultura.
Transición a la primera dieta seca del lechón
Si nos centramos en la dieta de transición, esta debe ser siempre gradual y suave. Inclusive debemos estimular su incorporación mientras está aún alimentándose de la madre. Así facilitaremos la adaptación y desarrollo del sistema digestivo e inmunológico. Aunque, ¿qué ocurre con el apartado nutricional?
Se recomienda una alimentación formulada específicamente para el lechón en sus primeros días. Debemos alimentarlos con una fórmula peletizada compuesta de macronutrientes como las proteínas y las grasas, necesarios para el crecimiento y desarrollo. También de microcomponentes igual de importantes, como lo son las inmunoglobulinas y los nucleótidos. Ya que todos estos nutrientes eran aportados al lechón a través del calostro.
Las inmunoglobulinas, también conocidas como anticuerpos, son moléculas de proteína. Estas promueven una mejor respuesta inmunitaria temporal en el lechón, adaptada específicamente a los patógenos a los que ha estado expuesta la cerda.
Se debe considerar igualmente que la transición alimenticia es tanto nutricional como en los ingredientes que componen cada alimento peletizado. Los lechones se adaptan progresivamente de metabolizar proteínas de origen animal a aquellas de origen vegetal. Por lo tanto, la composición del alimento también cambiará a medida que vaya creciendo el animal. Es decir, pasará de los aminoácidos más altos a los más bajos, y de las energías más bajas a las más altas.
Por lo tanto, la formulación de la primera dieta del animal debe facilitar estas propiedades, y estimular un crecimiento óptimo en el animal.
¿Cualquier dieta para lechones es suficiente?
Nutrir al lechón en sus primeros días debe ser objeto de una estrategia de alimentación efectiva. Ya que los requerimientos nutricionales de los cerdos varían a medida que crecen. Por esta razón es clave ajustar paulatinamente la composición nutricional del alimento. Por ejemplo, el aporte para un lechón en formación variará respecto al formulado para su crecimiento o engorde. Sólo así podremos promover que los animales tengan una dieta adaptada a sus necesidades y objetivos comerciales.
Cada vez más granjas porcinas optan por nuestra línea Inicial Wayne para cerdos. Su formulación abarca las propiedades clave para una nutrición óptima. Además, contiene las hemo-proteínas necesarias, lo que minimiza la presentación del estrés en los lechones por el cambio a dietas secas. Igualmente reduce el riesgo de problemas digestivos, las comunes diarreas, pérdidas de peso y mortalidad en esta etapa.
Inicial Wayne está dividida en 3 fases, y debe administrarse a voluntad en pequeñas cantidades. De esta manera el lechón vaya acostumbrándose a consumirla, desde el día 15 de edad.
Consideraciones finales en la nutrición del lechón
Tengamos en cuenta que en la mayoría de las instalaciones, la capacidad del comedero por animal puede ser mayor que la cantidad de alimento consumido. Durante los primeros días es recomendable dispensar el pienso que comerán en 24 horas, mantener la boca del comedero correctamente regulada y siempre lo más limpio posible.
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