Existen diversos sistemas de crianza de terneras de lechería, unos con más ventajas y desventajas que otros. Los sistemas de crianza están diseñados en relación de su situación geográfica y las condiciones climáticas imperantes en las diferentes zonas de explotación.
Las diferencias entre los sistemas de crianza se acentúan más en cuanto más intensivo sea el manejo. Aunque cualquiera sea el sistema de crianza se debe obligatoriamente cumplir con determinados aspectos. Veamos algunos de ellas:
- Proveer de instalaciones limpias y bien ventiladas pero sin excesivos vientos.
- Asegurarse que la ternera reciba el calostro en sus primeras horas de vida y desinfección adecuada del ombligo.
- Alimentar diariamente mínimo con 4 litros de leche entera o lacto reemplazante.
- Proveerlas de balanceado “Ternera Inicial WAYNE” alto en proteína en cantidades de 1 a 1,5 Kg por día en función de su edad y crecimiento.
- Proveer de heno de buena calidad, pasto seco o forraje verde picado en cantidades de consumo a voluntad.
- Asegurarse que el agua de bebida sea limpia. Si es posible sea potable todo el tiempo.
¿Cuáles son los principales sistemas de crianza de terneras?
Entre los principales sistemas de crianza están:
- Jaula elevada: son jaulas individuales bajo techo de 1,5 m2 mínimo. Cuenta con un piso de rejilla y paja seca para mantener calor.
- Pesebrera: son áreas de colectivo donde se pueden alojar 2 o más terneras con comederos colectivos y bebedero de agua en cajón.
- Casetas individuales: consiste en cabinas portátiles de 1,5 m2 mínimo dispuestas en un potrero especial destinado a criar terneras. Además, deben ser movilizadas al menos 1 vez por día en función de la hierba disponible en 3 m2 entre cabina y cabina.
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Dpto. de Ganadería
